La capital del país dio un nuevo paso hacia la protección de la fauna doméstica y silvestre: el Concejo de la ciudad aprobó nueva reglamentación que prohíbe la comercialización de animales vivos en plazas públicas o privadas de Bogotá.
La venta de aves ornamentales, gallinas, perros, gatos, conejos y periquitos quedó prohibida gracias a un acuerdo municipal, impulsado y aprobada por el Concejo de Bogotá, tras evidenciar el maltrato y las condiciones de insalubridad que en la mayoría de ocasiones mantenían a estos animales, en plazas de mercado de la Capital.
La medida que ya pasó para la firma de la alcaldesa, Claudia López, también desincentiva a los criaderos de mascotas, acusados de cruces desmedidos y sin control de animales para la venta, que termina con mascotas con enfermedades genéticas y hereditarias. Así como obliga a comercios autorizados para la venta de mascotas a cumplir con estrictas medidas de bioseguridad, salubridad y manejo de los animales, pues ese tipo de venta sólo puede ser prohibida mediante Ley de la República.
Concejales de la ciudad celebraron la decisión:
La medida tiene seis meses para ser implementada, lo que indica que deberá entrar en vigencia a finales de junio de este año.